miércoles, 30 de septiembre de 2009

Los tranvías de Hiroshima!!








Yo, apasionado de los tranvías, casi dueño de uno en Lima, nuestro querido Vagón del Recuerdo, del Museo de la Electricidad donde trabajo, amigo de tranviarios y ferroaficionados de varias ciudades y a punto de ser papá de nuevo, esta vez del libro sobre los Tranviás de Lima (http://patrimonioindustrialperu.blogspot.com/2009/09/libro-historia-de-los-tranvias-de-lima.html), no podía dejar de mencionar a los tranvías eléctricos de Hiroshima.

Y es que el encuentro con estos nostalgicos armatostes, que contrastando con la ciudad dinámica y moderna, avanzan lentos y ruidosos bamboleando a los pasajeros, me retornó a Barranco, a la tranquilidad de algo conocido, a la curiosidad de encontrar a un viejo amigo.

Hiroshima ha preservado sus tranvías como los japoneses lo saben hacer: con minuciosidad de artesano. Y es que los tranvías de esta ciudad se han convertido no solo en parte de su memoria colectiva, sino en una suerte de héroe sobreviviente a la bomba atómica. Cuando cayó esta infausta bomba, los tranvías y sus pasajeros sufrieron juntos la mortal explosión y compartieron los recuerdos y las historias.

Hoy el tranvía de Hiroshima atiende 9 rutas o líneas, y los viejos tranvias comparten los rieles con los nuevos, de diseños modernos y cómodos. Todos usan pantógrafo y tienen dos o más truques, a diferencia de nuestros desaparecidos "urbanitos" que tenían sólo uno.
Los pasajes cuestan 120, 150 y 210 yenes, de acuerdo a la distancia.

Tomé muchas fotos, aqui les dejo algunas. Que vivan los tranvías!

un tranvía destrozado por el impacto de la bomba atómica, a su alrededor todo es desolación. Fotografía tomada en el Museo Conmemorativo de la Paz

uno de los tradicionales tranvías, con una pequeña publicidad en uno de sus laterales.
un tranvía más cruzando el puente Aioi. Los tranvías pasan continuamente.
aqui uno mas moderno, haciendo carrera con un bolido Toyota.
uno de los modernos, llegando a la estación

Avancen!! se va el tranvía. Y yo me voy a dormir, son casi las doce de la noche y mañana viajamos muy temprano a Nara, asi que Sayonara
Pero antes, les dejo un video encontrado en Youtube, sobre los tranvías de Hiroshima.


lunes, 28 de septiembre de 2009

Hiroshima, el recuerdo de la bomba atómica






El viernes pasado viajamos a Hiroshima, la ciudad donde cayó la primera bomba atómica. Hiroshima está a 340 kms de Osaka, pero esta distancia se hace apenas en hora y media con el tren bala japonés, el famoso Shinkansen.
La ciudad queda en el delta del río Ota y su geografía es casi totalmente llana. Aun mantiene sus tranvías, que contrastan con la modernidad que ha alcanzado.
Fuimos a Hiroshima a conocer el Museo Conmemorativo de la Paz, un testimonio permanente de lo sufrido aquel fatídico 6 de octubre de 1945, día que un avión bombardero B29 de los Estados Unidos, mas conocido como el Enola Gay, dejó caer a las 8:15 de la mañana, la pesada bomba de uranio, de 4 toneladas de peso, bautizada como "Little boy".
La bomba no llegó a tocar el suelo, explotó a 600 metros de altura sobre el mismo centro de la ciudad, lo que causó mayor impacto destructivo por que fue mayor su radio de acción.
Ese día, los habitantes de Hiroshima se habían levantado muy tremprano como todos los días, y los escolares, en un numero de aproximadamente 8,400 estudiantes habían sido movilizados para cumplir sus labores en los centros de demolición de edificios, muy cercanos al hipocentro, es decir al punto de mayor impacto de la bomba.
Las escenas que narra el museo son desgarradoras. Los efectos se sufrieron en un area de 2 kilómetros a la redonda, los niños fueron las principales víctimas. Los que no murieron inmediatamente, murieron a los pocos días, por las quemaduras insufribles, la lluvia negra, y la falta de atención. Los que sobrevivieron murieron tiempo despues por los efectos de la radiación en sus cuerpos. Infame bomba que no valió un Pearl Harbor.
Sin embargo, la temática esta enfocada a no olvidar los efectos de las bombas atómicas, mas no a señalar a un culpable. En la exposición no se hace mayor referencia a los Estados Unidos ni se imprime una tónica revanchista. El objetivo del museo es resaltar la paz, un mundo sin mas bombas atómicas. La exposición es muy buena en este sentido; los testimonios de los sobrevivientes en pantalla multimedia, las guías auditivas con una narración intimista, la excelente museografía, los dioramas, el respeto por no explotar el morbo de la muerte, la conclusión, todo ello hace de este museo una visita obligada.

en el Shinkansen, haciendo 240 km/h, ni se siente.

dos vistas del Museo Conmemorativo de la Paz. El edificio del fondo en la segunda fotografía alberga la primera exposición, luego se cruza el puente - pasadizo y se llega a la segunda exposición con los testimonios humanos, en el edificio siguiente.

Un grupo de escolares en la maqueta de la ciudad de Hiroshima antes de la bomba.

la bombita "Little boy", 4 toneladas de peso. Hoy su poder destructivo es un "chancay de veinte" comparado con los modernos misiles con cabeza nuclear y las super bombas atómicas. Estará buscando el inefable Hugo Chávez construir su bomba con apoyo iraní?
un diorama muy explícito, una desgarradora escena; madre e hija con sus cuerpos deshechos por las quemaduras deambulan sin rumbo por una ciudad destruida. El ambiente parece un infierno.

Ahora Hiroshima es paz....
y tranquilidad. Un desocupado hijo del sol duerme en una banca del malecón, frente al río Ota.

domingo, 27 de septiembre de 2009

Algunas peculiaridades del Japón

El otro día al empezar la clase de diseño de maquetas el profesor Moriguchi Masaaki preguntó cual había sido nuestra primera impresión del Japón. A mi inmediatamente se me vino a la cabeza su sistema de transporte, con sus metros subterráneos, sus trenes superrápidos, sus estaciones impeclables, el monoriel, sus puentes larguísimos y altísimos y sus autopistas de dos y tres pisos, que solo las había visto en los circuitos de carritos de juguete, y esto es.

Pero la verdad, el Japón tiene muchas más cosas para sorprenderse, por que es un país diferente, y por que parece ser que si tienen un problema técnico, pues lo solucionan con la solución más dificil de realizar.

Comen con palitos, sus carros llevan el timón en el lado derecho y por ello se movilizan por el lado izquierdo. La gran mayoría profesa el shintoismo (que es la religión originaria del Japón), pero también el Budismo. Se quitan los zapatos al entrar a las casas, sus comedores no tienen sillas, se sientan en el piso y sus baños no tienen W.C., se ponen en cuclillas para hacer sus necesidades, como es el puro estilo japonés.

Hay muchísimos viejitos y pocos niños, esto es muy perceptible para cualquiera. Cada año el Japón tiene una mayor población de ancianos que pasan de los 100 años.

Los japoneses son muy amables, hay muchisimos ciclistas y ciclovias, pero donde no las hay, usan las veredas, lo que obliga a estar al pendiente para alguien que proviene de un país con poca cultura ciclista, como el nuestro, y donde los que manejan bici deben ir por la pista.
Aquí las bicicletas se dejan estacionadas sin mayor seguro, nadie las roba y hay máquinas expendedoras por todos lados, de jugos en botellas, de agua, de cafe, de gaseosas (solo Pepsi y Coca cola) de cigarrilos, estas últimas tienen un sensor para leer tu tarjeta de identificación a fin de que no lo usen los menores.

En fín, muchas cosas mas que seguramente iré mencionando a lo largo de este aburrido blog.


Aunque se visten occidentalmente y con mucha exclusividad, aun se puede ver, sobre todo las mujeres, vestir sus tradicionales kimonos. Una pareja muy amablemente aceptó posar para mi lente.


las autopistas y las vias del tren elevado aparecen por todos lados, es un despliegue de alta ingeniería.
aquí una autopista.

el edificio mas alto de esta ciudad es el Osaka Trade Center, con 55 pisos. Arriba, se puede apreciar la ciudad en lontananza, pero mucho mejor el puerto y el superpuente que lleva a los Estudios Universal.


Un buda, comparte la palestra de la fé con el Shintoismo.


uno de los carros ecológicos, aunque este era a pedales.

el baño "japanese style", todavía no lo he usado.

el tren super rapido se llama el "Shinkansen", era el orgullo de los japoneses, hasta que los franceses instalaron uno más rapido que éste. El Shinkansen logra alcanzar una velocidad de 300 kilometros por hora aproximadamente.


los japoneses acostumbrar quitarse los zapatos al ingresar a sus casas u otros sitios.


Mi profesor es un robot de la serie Asimo 700, jejeje. Es una bromita.

martes, 22 de septiembre de 2009

Un recorrido por el Museo de Ciencias



Son casi las 8 de la noche del martes 22 aquí en Osaka, mientras en Lima serán recién las 6 de mañana. Afuera llueve y en la tele pasan Full house con subtitulos en japonés.

Les comenté en el post anterior que aqui en Japón celebran un feriado largo los días lunes 21 y martes 22, asi que sumados al fin de semana se hicieron mas largos todavia. Sin embargo la pasé viendo películas, lavando mi ropa, jugando futbol internacional (por que los equipos estaban compuestos por dos mexicanos, un tunecino, un iraní y yo) y aprovechando el lunes en visitar el Museo de Ciencias de Osaka. Este último imperdible, así que aqui les dejo la crónica de la visita.
Nos habían recomendado a los del curso de museología aprovechar los días feriados para visitar otros museos de la ciudad, el dinero nos lo reembolsaría el Jica (así con mucho gusto, pensamos).

Como entenderán, proveniente del Museo de la Electricidad, tenía que conocer este museo, el cual tiene un piso dedicado a la electricidad y a la energía, en una exposición súper didáctica e interactiva.
El Osaka Science Museum se ubica relativamente cerca a la estación de Osaka, a un lado del río Tosabori y en el mismo complejo del Museo de Arte, sólo que éste último ocupa tres pisos subterráneos coronados por una enorme instalación de metal que le sirve de acceso. El Museo de Ciencia en cambio se aloja en un edificio semicircular, que por su apariencia enorme, sólida y sin ventanas, recuerda de alguna forma a la embajada de Estados Unidos en Lima.
En la entrada te da la bienvenida un gran robot que arma un cubo mágico en menos de lo que cualquiera de nosotros se comería una salchipapa. El robot escoge el cubo, lo mira y luego de estudiarlo te dice en cuantos movimientos lo completará. 14 movimientos es su récord, luego de lo cual levanta el cubo en señal de victoria. Un "Ohhh" de la gente se deja oir y los niños japonesitos abren sus ojos rasgados llenos de asombro.
El museo tiene 4 pisos. Luego de comprar el ticket de entrada, que cuesta 400 yenes (algo de 10 soles), un ascensor te sube hasta el cuarto piso donde empieza la exposción con la sala dedicada al universo, donde te explican de manerá lúdica no sólo el sistema solar, los agujeros negros, el lado oscuro y la topografía lunar, sino todas las leyes que rigen el universo.
Al tercer piso, dedicado a la Química, se baja, como a los demás, por una escalera eléctrica. La sala de química es la mas expositiva, hay algunos módulos interactivos, pero mas que todo la sala esta dedicada a mostrar en vitrinas, casi todos los elementos químicos de la recordada tabla de Mendeleiev. Digo casi todos por que no encontré el elemento radio y los demás elementos radioactivos, por que será, jejeje.
Pero sobre todo, esta sala presenta las materias primas que componen los productos modernos, como se obtienen los polímeros, las telas sintéticas, los plásticos, todo con el afán de reforzar el espíritu reciclador que es tan fuerte aqui en el Japón.

El segundo piso lo ocupa la exposición "Enjoy science" y como dice su título, es una sala para disfrutar, para apreder jugando, descubriendo y participando de los módulos. Esta sala tiene la mayor cantidad de módulos interactivos, para grandes y chicos; el magnetismo, la óptica, la acustica, la mecánica, la electrostática, la física son explicadas de una manera lúdica pero sobre todo educativa. Aqui había una gran máquina de Winshurt, otra de Van der Graaf y un gran globo de plasma. La sala culmina con una minisala para que los niños más pequeños reconozcan las formas geométricas.
Finalmente el primer piso era mi preferido. Esta sala esta dedicada a la generación de la electricidad. Apenas llegué a esta sala me encontré con una enorme intalación de una torre de alta tensión, con la explicación de la transmisión y distribución eléctrica, seguramente auspiciada por alguna compañía eléctrica. Una maqueta sobre las distintas formas de energía, destacando entre ellas una gran instalación de la generación nuclear y otra de la termoelectrica (en nuestro caso destacamos la generación hidroeléctrica), varios módulos interactivos para generar eléctricidad con la fuerza humana (como nuestra bici generadora), módulos multimedia con juegos sobre la construcción de las torres y la generación de la electricidad, una larga vitrina con la evolución de los artefactos eléctricos y el crecimiento del consumo de energía en el Japón (lo mismo que nuestra sala de artefactos antiguos y nuestro Foco Gigante para conocer el consumo de electricdad) y por supuesto la infaltable turbina, en este caso, una mediana turbina francis, hacía la analogía con nuestra rueda Pelton que rebibe a los visitantes en nuestro museo.
Sin duda son muchas mas cosas que contiene este buen museo que escapan a contarlas en esta apretada crónica. La museografía es impecable, los módulos muy bien mantenidos y sobre todo cumplen cabalmente su comedito: asombrar, enseñar y divertir, en ese orden.

Las comparaciones son odiosas, mas aún cuanto hay tanto que comparar con nuestro país, que no tiene un museo de ciencia. Sin embargo en lo que respecta al Museo de la electricidad, puedo decirles que salvando las distancias y las economías, el nuestro también tiene el mismo guión museográfico que esta sala del museo japonés: el fenómeno eléctrico, las fuentes de energía, la generación, transmisión y distribución de la electricidad, la historia oral y la evolución de las aplicaciones eléctricas y el consumo eléctrico. Esta visita valió, mas que para comparar, para confirmar y recoger muchas ideas museográficas. Vale.

el Museo esta a uno de los lados del río Tosabori, canalizado y usado también para practicar la motonáutica.

En primer plano la gigante instalación de metal que da acceso al Museo de Arte, diseñado por el arquitecto argentino Cesar Pelli, el mismo que diseñó las famosas Torres Petronas de Kuala Lumpur. Al fondo el edificio del Museo de Ciencias.

el Robot del cubo mágico. Yo lo (des) armo más rápido.
Aqui yo junto a una exhibición sobre electromagnetismo, la siguiente foto el experimento de las poleas y la fuerza.

los niños se divierten y aprenden
una maquina de Winshurt!! mas grande que la del Museo de la Electricidad

exta vitrina me parece muy similar a una vitrina nuestra, mmmm

el museo visto bajando de la tercera sala hacia la segunda

la instalación sobre las torres de alta tensión, muy ilustrativa

la evolución de los artefactos electricos separados por décadas. Los de los 60 ya eran made in Japan, igual en los 70 y 80, los de los 90 y 2000 son made in China. Aqui también llegó este tigre asiatico.

un niño tratando de generar con su esfuerzo, sufiente electricidad para encender alguno de los artefactos de la mesa. No lo logró pero vale el esfuerzo.

lunes, 21 de septiembre de 2009

Terminando la semana

No he escrito en mi blog hace algunos días, así que ahora les contaré como terminó la semana de clases y luego como pasé los feriados japoneses al comenzar esta semana, pero esto último será para el siguiente post.




La semana se clases en el Minpaku continuó el jueves con una lectura sobre Museos de Arte popular en Japón. El gran impulsor y benefactor de este tipo de museos fue el aristócrata y banquero Keizo Shibusawa, quien logró recolectar una extensa colección de objetos utilitaros de todas las zonas del Japón, interesado más en conocer la diversas actividades económicas; así logro reunir objetos de las actividades agrícola, pesquera, manufacturera, entre otroas, lo que se fue ampliando con objetos domésticos de la vida diaria japonesa, reconociendo en ellos un gran valor artístico. Shibusawa fue un visionario de los museos del folklore nipón.

Actualmente el Minpaku alberga toda la colección de Shibusawa, parte de la cual esta en exhibición y otra, la mayor, conservada en los enormes storages del museo. Hacía alli fuimos con el profesor Kondo Masaki, quien nos mostró muchos de estos objetos y sobre todo el sistema de almacenamiento, conservación y registro de los objetos.

Pero los almacenes del museo albergan muchos mas objetos y de todas partes del mundo. Adivinen que enontre entre los estantes de objetos: una imagen de Jesús y otra de la virgen María, para ellos solo objetos que ilustran sobre la cultura del catolisismo. Otro objeto fue una tradicional tabla de Sarhua, proveniente de Ayacucho. Aqui las fotos:

nuestras imágenes religiosas en un espacio de los almacenes del museo

la tablita de sarhua, que es en realidad una viga o madero, tiene inscrito: "Sarhua, 6 de octubre de 1952. Presente del compadre don Alejandro Ramos..."

El viernes tuvimos la clase sobre leyes de museos en Japón, muy interesante, más a mi que me interesa el tema del marco jurídico de los museos y sobre todo del patrimonio cultural. Es un tema que ampliaré oportunamente. Pero a decir verdad mas entretenido estuvo la clase siguiente, sobre riesgos, seguridad, prevención de desastres y prevención de vandalismo en los museos, a cargo del simpático Sr. Wada Norimune. Al final de la clase se animó a contarnos que en sus varios años en el museo habia escuchado a los fantasmas que rondan las salas del Minpaku. Todos abrimos los ojos y los oidos! Qué?? si, en el museo hay fantasmas, nos dijo, no los hemos visto, pero hemos visto y escuchado por las cámaras de seguridad, moverse los objetos, los muebles y el llanto de personas, comentó con una sonrisa que más que una broma, sabía a un secreto ahora compartido.

el enorme edificio del museo no solo alberga una magnífica exposición, también guarda sus fantasmas, buuuuuuuuuuuu

el entretenido jefe de seguridad del museo, Norimune san y sus monitores de seguridad. El museo tiene 31 cámaras de seguridad, solo en las salas de exposición, sensores de humo, de movimiento, láser, hidrantes super modernos, extinguidores de lujo. Solo les falta un guachiman made in Perú.

miércoles, 16 de septiembre de 2009

En el MINPAKU

Minpaku es como suele llamarse aqui en Japón al renombrado Museo Nacional de Etnología, un verdadero centro de investigaciones etnológicas que tiene un enorme staff de académicos investigando sobre casi todas las culturas del mundo, por citar un dato; el arqueólogo japonés Yuji Seki, conocido en el Perú por sus notables descubrimientos en el norte del país, era un investigador del Minpaku.
Aunque a los peruanos seguramente este nombre nos suene a un plato de chifa, la verdad que es que este es uno de los museos etnológicos mas renombrados del mundo, que se codea con el British Museum y que actualmente tiene una exposición temporal cedida gentilmente por el Museo Canadiense de la Civilización.
Aqui en este museo empezaron nuestras clases sobre museología y por ello tuvimos la oportunidad que el mismo Dr. Kenji Yoshida, uno de los investigadores principales del Minpaku nos hiciera de guía por el museo, explicándonos al detalle sobre la exposición.
Empezamos la visita por la sala de culturas de América y el Perú tenía un área destacada donde una enorme fotografía de Macchu Picchu da la bienvenida, sin embargo era resaltable la exhibición de nuestros trajes típicos y arte popular.
Una de las salas que llama mucho la atención por la museografía y por las culturas mismas es la de Africa. Me impresionó el enfoque sobre la contemporaneidad en las tradiciones de dichas culturas. La cultura arabe también fue muy interesante.

Es de destacar que el Minpaku utiliza mucha tecnología del multimedia en la exposicion, pero que esta no le quita el protagonismo a la exposición misma, convirtiéndose en una herramienta excelente para la museografía. La iluminación no es directa en la mayoria de los casos, pero permite totalmente apreciar la exposición y enfocar el objeto museable. Aqui algunas fotografías al respecto.

al inicio de la exposción, un panel interactivo con audio incluido informa del contenido y ubicación de cada sala de la exposicion... pero sólo en japonés.

El Minpaku tiene un area que alberga una fila de módulos de audio - guías, donde el visitante puede recibir mayor informacion sobre cada una de las culturas.

el Dr. Yoshida explicándonos el plano del museo y la distribución de las salas.

la sala de America alberga un área sobre el Perú, aqui los trajes de las regiones.

arte popular en la exposición sobre el Perú. Retablos ayacuchnos y cruces de camino.

Un rey masai del Africa dala bienvenida a la sala sobre este continente.

la exposción sobre el mundo árabe cuenta con montajes en tamaño natural, como la de esta tienda de campaña con todos sus utensilios. Hasta expedía un olor que podría asegurar que andaba un camello cerca, jejeje.

otro módulo sobre los árabes, esots son de jordania. Motasem, el compañero de Jordania se puso muy contento.

La exposición también incluye interatividad, como este módulo de instrumentos musicales del asia que son tocados por estas señoras.

aqui con un oso polar, aunque solo su piel. Exposición sobre los habitantes del Canadá.

impresionante módulo interactivo con tecnología 3D. Aqui el visitante puede pararse frente al televisor y forma parte de la historia que el museo cuenta sobre la cosmovisión del los primeros habitantes del Canadá. Yo me convertí en el hermano castor.

luego de la visita, tomando una pepsi en los jardines del museo.

finalmente el profesor Yoshida nos departió una clase para discutir la museologia del Minpaku.

Al regreso, una foto de las vias para ciclistas que hay en toda la ciudad. Mucha gente se moviliza en bicicletas aqui en Japón.